SolemNocteInfinitus

Un Corto Lapso De Vida y Palabras Seco, el río, la vista. Ojos grises, vagos. Voces, silencio, viento. ¿Vida, que has hecho? Se hundió en la arena, desapareció como el sol al atardecer, lo observé, en la distancia, a través de un cristal de ilusa simbología. Negro, el sueño, la nada. Susurro hueco, vacío. Vidas, hojas, universo. ¿Cuál fue el sentido de todo? Caminé a buscar sus huesos, tantos colores escuchados, lunas pasadas, paso a paso la arena me trago, al final lo encontré, y un espejo en la lejanía. -Solem Nocte Infinitus-

Un Niño Sin Voz Siempre he deseado, poder tocar el cielo, correr sin mirar atrás, llorar, reír y no escuchar. Pero no puedo, no puedo… La noche anuncia un eclipse, entre la sombra del sol, letras rojas que dicen mi nombre, soy parte de la oscuridad. Siempre he soñado, poder tocar el mar, navegar hasta el horizonte, en silencio, solo, libre. Pero no puedo, no puedo… Soy la sombra de ustedes… -Solem Nocte Infinitus-

En la Habitación Estoy amarrado por telas negras, en una habitación blanca, donde el reflejo en un espejo, muestra un sueño muerto. El suelo es el universo, y las estrellas ya son efímeras. Me veo, te veo, en un sol sin calor, escribo en el mantel del cosmos, palabras asesinas que no se ven, sigue hambriento el monstruo que no muere. El techo es la nada, y mis ojos la luz apagada. -Solem Nocte Infinitus-

No Solo Existen Las Palabras No todo son palabras, existen las caricias, existen los besos, existen los abrazos. No todo son palabras, existe la diversión, existe la desnudez, existe la pasión. No todo son palabras, existen las miradas, existen las manos, existen los cariños. No todo son palabras, existe el fuego, existe el tiempo, existe el silencio. -Solem Nocte Infinitus-

El Alma de un Niño Entre el silencio de cada nota, allí reside, una sombra que sonríe, un beso que nunca fue dado, un universo guardado en un recuerdo. Dentro y fuera, el golpe del viento. Un papel en blanco que vuela, lleno de letras sin ser jamás escritas, lleno de sentires ya tristemente olvidados, unos ojos que ya no pueden ver negros y blancos. Lejos y perdida, el alma de un niño. -Solem Nocte Infinitus-